Barça destroza al Madrid en duelo femenino histórico: récord mundial de asistencia
Las catalanas ganaron 5-2 ante 91.553 espectadores.
El Barcelona goleó a un competitivo Real Madrid (5-2), selló el pase a las semifinales de la Liga de Campeones y disfrutó de una fiesta histórica para el fútbol en el Camp Nou, que registró un nuevo récord mundial de asistencia en un partido femenino con 91.553 espectadores.
Tras el 1-3 favorable a las vigentes campeonas de Europa, el resultado deportivo, que se decidió en el segundo tiempo cuando las jugadoras azulgranas remontaron un 1-2 en contra, quedó en un segundo plano.
Decía la capitana azulgrana Alexia Putellas que este jueves podía significar el inicio de "una nueva era". No le faltaba razón: el templo azulgrana acogía el primer partido oficial con público del equipo femenino de fútbol.
Así lo entendió también el socio y aficionado del Barcelona que casi ocupó los más de 99.000 asientos para vivir una tarde de fútbol para el recuerdo.
Tardó, eso sí, en casi llenarse el Camp Nou. Los atascos en los aledaños del estadio impidieron que todos los 91.553 aficionados que finalmente acudieron al partido participaran en el mosaico previo ('More than empowerment': 'Más que empoderamiento') y muchos se quedaron sin ver el primer tanto del encuentro, obra de Mapi León (1-0, min.8).
La central aragonesa se inventó un centro con la zurda que se envenenó para convertirse en un disparo que sorprendió a Misa, la guardameta del Real Madrid.
Rugía el público azulgrana, que veía cómo su equipo domaba el partido con el balón y anulaba a su rival, bien posicionado en defensa, gracias a la presión tras pérdida.
El monólogo azulgrana se interrumpió por unas manos de claras de Irene Paredes en el interior del área. La colegiada no dudo en señalar penalti y Olga Carmona, la mejor jugadora del Real Madrid en el primer tiempo, empató el encuentro con un disparo raso y ajustado que Paños no tocó por poco (1-1, min.16).
Descolocó el tanto a las azulgrana, que no sufrían en defensa pero que se mostraban algo imprecisas en el último pase y de cara a portería.
Alexia Putellas y Graham Hansen gozaron de las ocasiones más francas por parte del Barcelona antes del descanso, pero sus tiros no vieron portería.
El Camp Nou no paró de animar en un primer tiempo en el que el Real Madrid, como ya sucedió en la ida pese al 1-3 en contra, demostró que es un equipo muy bien trabajado tácticamente y que sabe cómo competir contra el vigente campeón de Europa.
Y en el segundo tiempo, cuando se vieron los mejores minutos de fútbol, puso el miedo en el cuerpo de las jugadoras del Barça con el golazo del partido Zornoza. La centrocampista madrileña vio a Paños avanzada y, desde unos 45 metros, dio una primera ventaja a su equipo (1-2, min.48).
La insólita alegría le duró cinco minutos al Real Madrid, el tiempo que tardó Aitana Bonmatí en desmarcarse, recibir la asistencia de Jenni Hermoso y cruzar el balón con un chut raso (2-2, min.52).
Estallaba el público azulgrana de júbilo, que quería más goles. Y llegaron. El Barça respiró algo más tranquilo con el tercero de Claudia Pina (min.55), que con la zurda dibujó una parábola que se coló por la escuadra izquierda.
Con las jugadoras del Real Madrid algo desgastadas físicamente, el Barcelona jugó a placer con el balón, momento en el que el talento de Hansen y Alexia reapareció.
La capitana azulgrana sentenció la eliminatoria con el cuarto gol (min.62), con un remate que no consiguió detener Misa ni Ivana bajo palos, y la extremo sueca se disfrazó de '9' para anotar el quinto (min.70) cazando un balón en el interior del área.
El marcador ya no se movió, pero al Camp Nou le faltaba por celebrar el récord mundial de asistencia. El club lo anunció en el minuto 87 por la megafonía y, como si de un gol se tratara, el público rugió, mientras los entrenadores de ambos equipos reaccionaban también con aplausos.
Con el pitido final, las jugadoras, felicitadas por las jugadoras del Real Madrid, dieron una vuelta al estadio ovacionadas por su público y poner el broche final a una jornada para la historia.
EFE